Todos nuestros consejos para cuidar tus prendas de punto.

Nuestras creaciones están confeccionadas con fibras de alta calidad que requieren cuidados especiales, por lo que es importante consultar siempre las instrucciones de la etiqueta de composición y cuidado.

1 - LAVADO

El cuidado depende del grosor del punto y de su composición.

Un jersey o rebeca de algodón puede lavarse a máquina.
En este caso:

• Lava tus prendas a 30 °C en una red adecuada para tejidos delicados.
• Utiliza un detergente especial para lana, preferiblemente líquido, ya que los detergentes en polvo pueden dejar marcas.
• Evita utilizar suavizantes, ya que pueden dañar las fibras de tu jersey.

Un jersey de lana debe lavarse a mano en agua fría para evitar que encoja (a las prendas de punto les gusta el agua, pero no el calor).

• Acláralo bien con agua limpia, sin escurrir el jersey para no dañarlo.
• Amasa ligeramente el jersey, envolviéndolo en una toalla para eliminar el exceso de agua antes de secarlo.

2 - SECADO

En todos los casos (lana o algodón), se debe secar en plano y al aire libre, doblando las mangas para no estirarlas. Debe secarse lejos de la luz solar directa para conservar su forma y color originales.

3 - PLANCHADO

El planchado no es necesario, ni se recomienda, pero en caso de arrugas mal hechas, se puede planchar a baja temperatura por el reverso con una pattemouille.

4 - PILOTAS

Tenga en cuenta que sus prendas de punto pueden presentar pilling, esto no es señal de mala calidad, sino simplemente fibras cortas que sobresalen debido a la construcción específica de este producto.
Puede eliminarlas con una cuchilla para pilling. A medida que lave y utilice sus prendas de punto, se irán formando menos bolitas.

Las prendas deben estar dobladas y nunca colgadas en una percha, ya que esto podría deformar el punto.

Se puede utilizar vinagre blanco para reavivar los colores durante la limpieza.

Para tejidos finos como la cachemira o la lana merina, recomendamos utilizar un peine para cachemira. Coloque la prenda en posición horizontal y péinela suavemente ejerciendo una ligera presión.

Todos nuestros consejos para cuidar tus piezas de lana.

1 - LAVADO

No tengas prisa por limpiar tus prendas de lana, ya que la lana no retiene los olores y tiene buenas propiedades antibacterianas, por lo que no es necesario lavarlas con regularidad: basta con airearlas.

Si el olor persiste, también puedes utilizar un spray ecológico, o incluso champú para limpiar a mano prendas de lana delicadas, como la cachemira.

Un lavado a máquina (en el programa de lana o prendas delicadas) o a mano al principio y al final de la temporada será suficiente.

• Utiliza un detergente especial para lana o prendas delicadas para no dañar las fibras.
• Ten cuidado de no tirar, retorcer o frotar las costuras durante la limpieza, ya que podrías deformarlas.

2 - SECADO

Secar en plano y al aire libre, doblando las mangas o las perneras para que no se aflojen.

3 - PILOTAS

Hay que tener en cuenta que la lana puede apelmazarse, lo que no es signo de mala calidad, sino simplemente de que sobresalen fibras cortas.
Éstas pueden eliminarse con una maquinilla de afeitar. La lana es una fibra noble que se va apelmazando cada vez menos a medida que se lava y se utiliza.

Procure proteger sus piezas de lana de las polillas. Puedes poner bolas de cedro o lavanda entre tus piezas.

El vinagre blanco puede servir para reavivar los colores al limpiar.

4 - TIPOS DE LANA

Alpaca: procede de las alpacas. Es suave, ligera y resistente, pero frágil.

Cachemira: procede del plumón de cabra. Es una fibra de lujo, muy rara y preciosa. Es fina, suave, sedosa y muy cálida, aunque muy ligera.

Merino: procede del esquileo de las ovejas merinas. Es densa, rizada, elástica, resistente, suave y muy aislante por sus propiedades termorreguladoras.

Mohair: procede del esquileo de la cabra. Es ligero, brillante, suave y muy buen aislante térmico.

La seda es un material noble y delicado que dura mucho tiempo si se cuida bien.

1 - LAVADO

Recomendamos lavar a mano en lugar de a máquina.

• Lavar en agua fría, no tibia,No dejar la prenda en remojo más de unos minutos.
• Tener cuidado de no frotar ni arrugar la prenda al lavarla, ya que la seda es frágil y esto podría dejar marcas.
• Recomendamos utilizar un detergente líquido delicado adecuado para la seda.

2 - SECADO

Recomendamos secar la prenda directamente en una percha al aire libre, pero lejos de la luz solar directa para evitar que se decolore. También puede secarla previamente en una toalla para eliminar el exceso de agua, pero no arrugue la blusa o el vestido para no dañar las fibras. En algunos casos también recomendamos la limpieza en seco.

3 - PLANCHADO

Si desea planchar su artículo, le recomendamos que lo haga por el revés de la prenda, con un paño ligeramente humedecido. La plancha debe estar en la posición «seda», si existe, y lo más baja posible para no dañar las fibras. También puede planchar la prenda al vapor si dispone del equipo necesario.

Nuestros consejos para cuidar tus prendas vaqueras.

Le recomendamos que lave su prenda vaquera una vez antes de ponérsela. Por defecto, las fibras se tensarán y la cintura se ajustará ligeramente, pero tu prenda volverá a relajarse cuando la lleves puesta. En todos los casos, es importante consultar siempre las instrucciones de la etiqueta de composición y cuidado.

1 - LAVADO

Una pieza de tela vaquera apenas puede lavarse. Lavarlo con demasiada frecuencia puede dañar las fibras y el color del vaquero. Intenta lavar pocas veces por temporada, sobre todo si lo haces a máquina. Para espaciar los lavados, acuérdate de airear la tela vaquera poniéndola al aire libre, al abrigo del sol, o dejándola unas horas en el congelador. Así se eliminarán las bacterias y se purificará el tejido.

En primer lugar, asegúrate de que no queda nada en los bolsillos de tus vaqueros antes de lavarlos, para evitar la decoloración del tejido.

• Te recomendamos un ciclo suave, a 30 °C como máximo por el revés, con un tapón de vinagre blanco para fijar el color.
• Introduce la prenda con otras prendas, sin llenar demasiado la lavadora para evitar marcas en el tambor.
• Para vaqueros oscuros, utilice un detergente para tejidos oscuros. En general, utilice un detergente certificado para proteger sus fibras.

2 - SECADO

Limitar la cantidad de centrifugado evitará que la prenda quede más deslavada. Elige una velocidad máxima de centrifugado de 400 rpm.

Evite la secadora, que consume mucha energía y daña las fibras. Seca la prenda al aire libre por el revés y al abrigo del sol, preferiblemente tumbada.

3 - PLANCHADO

El planchado no es necesario, pero puede hacerse por el revés de la prenda.

Tenga en cuenta que el tejido vaquero es un material natural que desarrolla una pátina y cambia con el tiempo, lo que hace que su prenda sea única. La tela vaquera se destiñe y destiñe en mayor o menor medida con cada lavado. La fibra vaquera se estira y vuelve a relajarse con el uso. Esto también puede dar lugar a una ligera diferencia de longitud en comparación con los vaqueros sin lavar.

Todos nuestros consejos para cuidar sus artículos de cuero.

El cuidado del cuero es necesario para prolongar la vida de sus piezas. La falta de cuidados puede provocar la deshidratación del cuero y el deterioro del acabado.

Recomendamos un mantenimiento una vez al año, siguiendo las instrucciones de la etiqueta o la caja.

Es importante saber con qué tipo de cuero se está tratando, para saber si hay que tomar alguna precaución específica.

En la mayoría de los casos, el cuero puede limpiarse con un paño de algodón limpio.

• Comenzando por espolvorear suavemente el cuero con el paño seco y luego humedeciéndolo ligeramente.
• Limpie el cuero con un poco de crema adecuada para cuero (liso, barnizado, etc.), como la crema universal SAPHIR, una vez al año con un paño limpio y seco.
• Realice movimientos circulares enérgicos sobre toda la superficie y, a continuación, pula con un paño seco.

El cuero es un material natural, que requiere mucha delicadeza.
Con el tiempo evoluciona y adquiere una pátina: este desgaste natural se manifiesta a través de variaciones de color y textura.
Se debe proteger de la humedad, la exposición prolongada a la luz y el calor excesivo.

A continuación se ofrecen algunos consejos que le ayudarán a mantener sus bolsos y otros artículos pequeños de cuero:

• Te aconsejamos proteger tus artículos de la humedad (lluvia) y de cualquier fuente de calor (radiador, sol).
• En caso de contacto con agua, no limpie el cuero, frótelo con un paño de color natural para absorber el líquido.
• Dependiendo del tipo de piel, podrás mantenerla periódicamente con una leche apta para marroquinería (leche SAPHIR disponible a la venta en nuestras tiendas), que te permitirá reducir marcas, rayones y posibles rayones.
• Tenga especial cuidado con las bolsas blancas o de colores claros para evitar la suciedad, ya que son difíciles de limpiar.
• Evite impactos sobre las piezas metálicas, ya que el acabado podría deteriorarse.
• No sobrecargues tu bolso para que mantenga su forma original el mayor tiempo posible.

Cuando no esté usando su bolso, guárdelo en su funda protectora, forrado con papel de seda para mantener su forma, protegido de la luz y la humedad.

Cuidado con las transferencias de color: su ropa puede manchar el cuero, así que evite el contacto con abrigos y textiles crudos que sangran, como jeans oscuros, por ejemplo, sus pigmentos de color pueden transferirse al cuero y dañar irreversiblemente el bolso, y viceversa.

Las joyas Soeur están hechas de metales delicados que requieren especial cuidado y atención. Una joya vive con quien la posee, su uso diario le dará una pátina y tu vida la marcará, haciendo que tu joya sea única.

Ofrecemos joyería vermeil y latón. Todas nuestras joyas bañadas en plata están hechas de plata maciza recubierta con 5 capas de oro (vermeil de 5 micras) y están fabricadas en la India por nuestro taller asociado. Todas nuestras joyas de latón (aleaciones de cobre y zinc) se fabrican en Vietnam. Nuestras piezas de latón dorado están bañadas (paso realizado en Francia) con una capa de oro real (1 micra).

El mantenimiento es similar para estos dos materiales, a continuación encontrarás todos nuestros consejos para preservar la belleza de tus joyas el mayor tiempo posible:

• Es fundamental evitar colocar tus joyas cerca de cualquier fuente de calor o humedad.
• Evitar el agua y el sudor (nada de ducha, piscina o mar).
• Evite productos cosméticos o del hogar, aplique su perfume antes de ponerse sus joyas, dejando suficiente tiempo de secado para evitar el contacto directo con el metal.
• Limpia tus joyas con frecuencia frotándolas suavemente con un paño suave o una gamuza para eliminar cualquier impureza o sustancia que pueda alterar su apariencia.
• Para evitar el proceso de oxidación natural, te recomendamos usar tus joyas con la mayor frecuencia posible y no dejarlas en una caja cerrada por mucho tiempo.
• Cuando no esté usando sus joyas, debe guardarlas en un lugar fresco y seco en su bolsa.

Si tus joyas muestran signos de oxidación, puedes limpiarlas suavemente con agua jabonosa y un paño suave. Enjuágalo bien y sécalo bien una vez limpio.
Este remedio de nuestras abuelas también funciona muy bien con el bermellón: ¡sustituye el agua con jabón por pasta de dientes de pasta blanca!

Para cualquier pregunta, no dude en ponerse en contacto con nuestro servicio de atención al cliente en serviceclient@soeur.fr.

Todos nuestros zapatos tienen suela de cuero, garantía de calidad.
Para protegerlos, te recomendamos que coloques una almohadilla en la parte delantera de tus zapatos. De este modo, la nueva suela será menos resbaladiza en tiempo de lluvia.

Para nuestros zapatos de piel recomendamos limpiarlos con un paño suave y pulirlos periódicamente.
Para cuero partido o gamuza, considere impermeabilizar sus zapatos. Para limpiarlos, utiliza un cepillo suave y una goma de borrar pequeña para eliminar las manchas.
Para nuestros zapatos de piel estilo pitón o cocodrilo, te recomendamos utilizar una leche hidratante, como la crema universal SAPHIR disponible a la venta en nuestros puntos de venta.

Si tus zapatos se mojan, déjalos secar bien durante unos días antes de guardarlos. Recuerda que tus zapatos necesitan respirar, te recomendamos no usarlos por más de 2 o 3 días seguidos, si no quieres desgastar tus zapatos prematuramente.

Por último, cuando no estés usando los zapatos, procura guardarlos en su bolsa, si es posible forrada con papel de seda o con hormas para que conserven su forma original.

La longevidad de tu par de zapatos depende del cuidado que se tenga en su mantenimiento.

1 - LIMPIAR Y MANTENER

Antes de cualquier acción, es necesario limpiar tus zapatos. Para los zapatos de piel, se recomienda utilizar un paño húmedo para quitar el polvo. Luego déjalos reposar y secar durante unos minutos antes de aplicar los productos de cuidado.

En el arte de mimar, el lustrado de zapatos es un ritual a adoptar cada semana. Para ello, es importante la elección de las herramientas: un paño suave enrollado alrededor del dedo índice y recubierto con betún para masajear el cuero con ligeros movimientos circulares, y un cepillo encerador para cubrir las partes lisas y perforadas. Unos momentos más tarde, se debe utilizar un cepillo suave y un guante de pulido para terminar el esmalte de manera hermosa. Si se desea obtener un efecto espejo, es posible continuar con un esmalte: humedecer el paño suave con agua antes de cubrirlo con betún y masajear con movimientos circulares. Cada mes, para evitar la resequedad natural del cuero, es imprescindible la aplicación de una crema hidratante. Su efecto tonificante permite que los zapatos se mantengan flexibles y, al mismo tiempo, se vuelvan más bellos con el tiempo. Para completar el tratamiento se recomienda el uso de una grasa para nutrir la planta.

2 - CONSERVAR LA FORMA DE LOS ZAPATOS

La horma es fundamental para mantener la forma de los zapatos y garantizar su longevidad. En primer lugar, se recomienda disponer de hormas de madera adaptadas a la forma, largo y ancho de los zapatos. Como la madera es un material natural capaz de absorber la humedad, hay que tener cuidado de mantener las hormas alejadas de cualquier fuente de calor. Además, para proteger tus zapatos desde el primer momento, se recomienda utilizar un calzador. El pie se deslizará sobre la suavidad del cuero, preservando al mismo tiempo la talonera.

1 - LAVADO

Los trajes de baño Lido están diseñados para ser lavados a máquina. Por lo tanto, puede lavar sus bañadores a una temperatura máxima de 30 grados. Un lavado regular y un aclarado a fondo alargarán la vida de su bañador.

2 - SECADO

Lo mejor es secar al aire, pero evita las soluciones rápidas.

Las pequeñas manchas causadas por la crema solar, los alimentos grasientos y los bolígrafos pueden eliminarse con un simple jabón lavavajillas. Aplica una pequeña cantidad en la zona afectada y frota suavemente con los dedos. Si es necesario, utiliza una esponja suave o la esquina de una toalla suave. Para las manchas difíciles, basta con aclarar y repetir la operación.
No utilice nunca lejía.

Todos nuestros consejos sobre cómo quitar una mancha sin dañar su habitación.

Con o sin máquina, es fácil quitar una mancha si sigues los pasos adecuados.
Lo mejor es identificar el origen de la mancha para no empeorarla.

• Para las manchas de sangre, por ejemplo, evita el agua caliente, que fijará la mancha; el agua fría la eliminará.
• Para las manchas de agua, se puede aplicar localmente una mezcla de agua caliente y bicarbonato sódico. Dejar actuar durante 20-30 minutos y aclarar con agua templada. El auténtico jabón de Marsella, con más de un 72% de aceite vegetal, también servirá para eliminar la mancha con total tranquilidad.
• Para las manchas de grasa, se puede aplicar localmente detergente líquido y después aclarar con agua caliente.

Si su habitación está manchada, aplique auténtico jabón de Marsella sobre la mancha antes de meterla en la lavadora sin aclararla.